Estuve en Bolivia hace poco, para responder al comentario anónimo de otro cobarde bellaco masista que profirió una sarta de bajezas como respuesta a la denuncia de la anterior publicación sobre la corrupción del gobierno de Evo Morales.
Pero claro, los adjetivos no fueron producto de la indignación del injustamente calumniado, sino del cinismo del ladrón descubierto; fueron expresión de la impotencia del poderoso violador acostumbrado a la impunidad, que se ve expuesto en su vileza y sin posibilidad de que su poder lo salve esta vez del escarnio público.
Porque, más allá de que a los masistas les duela escucharlo, hay una corrupción generalizada, galopante, desproporcionada, angurrienta y sin precedentes en este gobierno. Los masistas se roban hasta los ceniceros de los ministerios, venden visas, pasaportes y hasta salvoconductos a los turistas. Venden activos y enseres de yacimientos. Venden lo que pueden porque ese es el único cambio del que son capaces: de robar más y peor que la derecha miserable e incapaz que parió el neoliberalismo.
Ahh, eso si, al Evo no le falta un tarado, un servil de tantos, que bajo un seudónimo que no tiene ni una dirección de referencia se presta a plantear el "ahora nos toca" como única tesis de sustentación de este mamarracho de gobierno.
Y me reclama el pagote, el tíitere seguramente empleado de algún ministerio, que los que no estamos en Bolivia no tenemos derecho a hablar.
Cómo si nuestras remesas no le dieran a nuestra familias el sustento que el incapaz de Evo no puede darles. Cómo si nuestro aporte no sostuviera la ecoinomía de un país que Evo se empeña en joder y empobrecer.
Pues estuve hace poco en Bolivia. Y vi lo que está pasando¡¡
Y ningún asalariado del gobierno de la corrupción me va a decir que me calle sólo porque vivo en EEUU. Bolivia es también mi país¡¡ Y no poque no estemos ahí, debemos ver callados cómo los saparrastrosos disfrazados de izquierdistas terminan de joder la patria como no pudieron hacer los facistas de ADN y el MNR.
Y defiendo a Manfred porque he visto que de todos los políticos bolivianos, es el único que supo usar el poder para construir y desarrollar su región. Y porque vi que es el único que tendría los pantalones para hacer lo que se debe hacer para salvar el país de este cancer de los extremismos de derecha y de izquierda que se farran a cual mejor los recursos de los bolivianos.
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